Hubo un día en que pensé que quizá todo el trabajo era inútil
y los autos tramposos nunca abandonarían la carrera. Sale el sol en la llegada
de la primavera, incipientemente vemos sus rayos puntiagudos como flechas del mismísimo
toro sentado, destinadas sin revancha ni
afán vengador a hundirse en el escudo protector de la ignorancia.
Es muy común que la ignorancia incapacitada para la opinión
sensata, se manifieste sin reparos haciendo causa de oscuros intereses sin
saberlo. Antes de enarbolar banderas por patrias perdidas en los corazones de
unos y otros, hay que analizar los hechos. Los hechos son fríos y claros,
inalterables e imparciales; por eso de ellos se desprenden siempre como frutos
maduros los juicios ecuánimes y ajustados llenos de natural objetividad.
No hace falta esforzarse para ver la verdad, solo hay que
mirar con ojos limpios y brilla por si sola. Los severos veredictos siempre han de ser honrados y las ponderadas
defensas han de ajustarse a la realidad elemental, pues si no es así, de nada
sirven.
La VERDAD, bella palabra…..sola se abre camino con el
tiempo. Si se ayuda a ello, todo se precipita y cuando cae la lobreguez con su
falaz artificio va atrayendo en su caída, por una ley tan ordinaria como cierta,
a todo elemento que no se transparente a los rayos implacables del astro
luminoso.
El día en que se honra a la admirable Venus, como no aceptar
la palma del triunfo….
Feliz Día
Penelope Glamour